EL COMERCIO.
El término comercio proviene del concepto latino
commercĭum y se refiere a la transacción que se lleva a cabo con el objetivo de
comprar o vender un producto. También se denomina comercio al local comercial,
negocio, botica o tienda, y al grupo socil conformado por los comerciantes.
El comercio, en otras palabras, es una actividad
social y económica que implica la adquisición y el traspaso de mercancías.
Quien participa de un acto de comercio puede comprar el producto para hacer un
uso directo de él, para revenderlo o para transformarlo. En general, esta
operación mercantil implica la entrega de una cosa para recibir, en
contraprestación, otra de valor semejante. El medio de intercambio en el
comercio suele ser el dinero.
No obstante, hay que subrayar que hasta la aparición
del dinero, las antiguas civilizaciones lo que hacían era llevar a cabo el
comercio mediante lo que se denominaba trueque. Esta operación consistía en
adquirir un producto en concreto de un vendedor al que se le pagaba otorgándole
otro producto que este necesitara.
De esta manera podríamos recalcar que dicha operación
comercial se basaba fundamentalmente en el intercambio de productos de primera
necesidad tales como podían ser los alimentos.
Asimismo, y haciendo uso de la Historia, también hay
que decir que existieron en el pasado lo que se dieron en llamar rutas
comerciales. Estas no eran más que diversos trayectos o itinerarios que
ejercían como enlaces entre lo que eran las zonas donde se producía un
determinado producto y las que, sin embargo, lo demandaban.
Entre las rutas comerciales más conocidas nos
encontramos, por ejemplo, con la de la seda que unía China con Europa; la Ruta
de la Nueva España que ejercía como vínculo entre Asia y América con Europa; o
la famosa ruta de las especias que unía al viejo continente con lugares de
Oceanía, China e India.
Itinerarios todos ellos que en muchas ocasiones
fueron los “culpables” de que se llevara a cabo el descubrimiento de nuevos
lugares y rincones del mundo y de que se impulsara la creación y la innovación
en áreas como la científica o la tecnológica. Algunos de los personajes
históricos que han sido fundamentales en el desarrollo de dichas rutas son
Marco Polo o Vasco de Gama.
Comerciante es aquella persona, ya sea jurídica o
física, que vive del comercio. Por lo tanto, la actividad comercial constituye
su sustento de vida.
Existen distintas clases de comercio según sus
características. El comercio minorista (también conocido como comercio al por
menor) se lleva a cabo entre el vendedor y el consumidor final (la persona que
adquiere el producto para utilizarlo o consumirlo).
En el comercio mayorista (o comercio al por mayor),
en cambio, el comprador no es quien consume o usa el producto adquirido. Su
intención es poder concretar una venta posterior del mismo producto, a un
precio más alto del pagado.
Comercio en derecho
Desde el derecho la definición anterior es aceptada, solo que es importante agregar que los actos comerciales deben tener fines de lucro para ser considerados como tales. Por ley queda determinado que los actos comerciales son aquellos donde la compra, venta o intercambio de bienes, que serán luego revendidos o alquilados.
Además la ley aclara que son actos comerciales los realizados en fábricas, mediante depósitos, comisiones e incluso el trasporte. Es por ello que se considera que desde el punto de vista jurídico el comercio es un concepto más amplio que en el ámbito económico.
Se entiende que es una actividad compleja, es por ello que se creó una rama específica del derecho destinada a legislarlo y mediar ante posibles conflictos entre comerciantes, esta rama es llamada Derecho Comercial. Las fuentes del Derecho utilizadas en esta rama del derecho son la ley y la jurisprudencia.
Comercio en economía
En la economía se lo entiende como el resultado entre oferta y demanda de los bienes, siempre y cuando haya algo que funcione como mediador, por ejemplo dinero y tenga fines de lucro. En este caso, no se contempla el proceso de producción o del consumo, solo se interesa en su intercambio.
También es importante destacar que según esta definición el trueque no puede ser entendido como un acto comercial ya que no hay un intermediario entre los bienes intercambiados. Es por ello que se entiende que la actividad comercial propiamente dicha surge a partir de la división del trabajo, donde la producción no es individual si no grupal. Algunos de los medios utilizados a lo largo de la historia han sido especias, metales, hoy en día es utilizado el dinero, los cheques, las tarjetas bancarias, etc.
A su vez a partir de esta actividad surgen los comerciantes: los mismos tienen como objetivo obtener una ganancia a partir de la venta de las mercancías. Para ello este sujeto suma a su patrimonio de manera temporal las mercancías, para luego poder ofrecerlas en el lugar de la demanda. Este puede aumentar o disminuir el valor de las mercancías según la demanda de las mismas.
Previo al surgimiento de los estados liberales ya comenzaban a realizarse prácticas de comercio internacional, esto quiere decir que los distintos países pueden intercambiar bienes y servicios, es decir se posibilita la importación y la exportación.
Se entiende por libre comercio a la libertad que tienen las naciones para realizar actos comerciales entre sí. Es permitido el intercambio de bienes y activos sin que haya ningún tipo de impuestos o trabas en los flujos de capital. Reconocidos economistas, como David Ricardo y Adam Smith plantearon teorías económicas donde explayaban la importancia del comercio internacional y libre.